EL CABALLERO
CABALLERO ARMADO ,
CON SU YELMO RELUCIENTE,
MIRANDO SIEMPRE AL FRENTE,
CON TENACIDAD SIEMPRE ARDIENTE,
EN LA INMENSIDAD DE LA LLANURA,
CUANDO TODO ES DIFERENTE,
RECOMENDANDO CON TERNURA,
AQUEL BESO ARDIENTE.
LA ESPADA EN LA CADERA,
EL REY SIEMPRE TAN VALIENTE,
PROTEGED A LA REINA,
ES EL COMETIDO DE TODO ENTE,
PORQUE NACÍ PARA GUARDAR
ESPALDAS DE OTRA GENTE,
PARA QUE SU VIDA PUDIERAN LLEVAR,
SIN PROBLEMAS ELOCUENTES.
POR TODO ELLO MIENTRAS PUEDA CABALGAR , DIRÉ SONRIENTE, SIEMPRE ESTARÉ ALLÍ, SIEMPRE ,HASTA LA MUERTE .
EVA.